Métodos para enseñar a los niños a abrocharse los cordones de las zapatillas

Aprender a abrocharse los cordones de las zapatillas es uno más de los aprendizajes de autonomía que deben realizar los niños. Y es que, aunque hoy en día existen muchas zapatillas con velcro que ahorran este trabajo, es fundamental no saltarse este conocimiento básico que les servirá para abrochar otros muchos elementos de la ropa: el cordón del pantalón, el cinturón de la bata, el del kimono de karate, las botas de fútbol...

Te enseñamos unos métodos para que puedas enseñar a tus hijos a atarse los cordones de forma divertida y amena.

Sistemas divertidos para enseñar a los niños a abrocharse los cordones de las zapatillas

Si te fijas en las estanterías de las zapaterías infantiles, es muy frecuente no ver zapatillas con cordones en tallas pequeñas. Por lo tanto, cada vez menos niños tienen menos oportunidades de aprender a atarse los cordones de los zapatos. Así lo demuestra también un estudio de la empresa holandesa AVG. Se encuestó a 2.200 madres europeas con niños de entre dos y cinco años. El resultado fue que el 19% de los niños podía manejar el smartphone, 1 de cada 4 niños sabe cómo abrir un navegador web, 1 de cada 5 sabía nadar y montar en bicicleta. Pero ni tan siquiera el 10% de todos los niños se ataban los cordones de los zapatos.

Actualmente incluso desde muchas escuelas infantiles o colegios insisten en que los niños usen zapatos con velcro porque no pueden pasar el día abrochando cordones, ya que los niños no conocen cómo hacerlo por sí mismos. Sin embargo, desde conmihijos.com te presentamos varios sistemas para que los niños puedan aprender esta habilidad que necesitan conocer. Se sentirán orgullosos de sí mismos cuando lo consigan. 

Usa una plantilla de zapatos para enseñar a los niños a abrocharse los cordones

Una plantilla de zapatos de cartón con cordones  es ideal para la práctica inicial. De esta manera, el niño puede practicar fácilmente hasta que lo consiga. Verá mejor el cordón que si tiene la zapatilla puesta y le resultará más cómodo.  

Puedes dibujar una zapatilla sobre una cartón y colorearla de forma divertida, o puedes simplemente realizar dos agujeros del tamaño del cordón en un trocito de cartón.

También puedes usar una zapatilla que agarre bien al suelo para que no se deslice cuando esté intentando abrochar los cordones.

Ahora llegan los dos métodos para aprender a abrocharse los cordones: 

Nudo para cordones: Orejas de conejo

- Primero, el niño debe aprender a hacer un nudo. Debe tomar un cordón en cada mano. Algunos niños necesitan poco tiempo para realizar un nudo simple y a otros les resulta más difícil trabajar con ambas manos al mismo tiempo. La clave está en practicar. Pueden. hacer un nudo tras otro. Orejas de conejo o árbol: hay dos formas de atar un lazo

- Una vez que tenemos el nudo, los niños han de hacer dos orejas de conejo con cada cordón. Luego, estas dos orejitas se anudan juntas. Es importante que lazos no sean demasiado grandes, de lo contrario, el bucle se soltará rápidamente.

Puedes hacer una pequeña rima para ayudarles a recordar lo que han de hacer paso a paso: 

• Oreja de conejo, otra oreja de conejo, una vez alrededor y luego a través de la meta.
• Una oreja de conejo, otra oreja de conejo, un abrazo y nos vamos de paseo.

Forma clásica de atar los cordones

El segundo método se considera la forma estándar de atar un cordón. Requiere un poco más de habilidad, aunque los adultos y los niños que son un poco mayores prefieren esta variante porque es más rápida y los nudos quedan más prietos:

- De nuevo se hace un nudo primero.

- Se hace una oreja de conejo con uno de los lazos y, se pasa el contrario alrededor. Se coloca alrededor del lazo y sobre el pulgar y el índice

- Luego, se forma un lazo con el cordón del zapato derecho, que se desliza debajo del pulgar izquierdo. 

Puedes hacerlo contando una pequeña historia: Había un árbol grande y grueso, y vino una serpiente, que tenía sueño. Se retorció alrededor del tronco y luego se echó a dormir. 

Vídeo corto con trucos para enseñar a los niños a abrocharse los cordones

Conclusión

Ya sea el método de las orejas de conejo o el método clásico, los niños han de aprender a abrocharse los cordones de las zapatillas. Es un aprendizaje que forma parte de la adquisición de nuevas habilidades y supone un paso más en su autonomía personal. Realizar una plantilla de una zapatilla le puede permitir practicar tantas veces como quiera.

Lo importante es enseñarle cómo hacerlo, ayudarle con paciencia y cariño y reforzarle cuando lo haya hecho bien.